Biografía de artista
Publicado el: 08/09/16

 

        Tu biografía de artista será el documento que dará la cara por ti cuando tú no estés presente; es una de las primeras cosas que alguien leerá de ti para decidir si le interesaría trabajar contigo.

        A dónde la puedes enviar: competencias, presentaciones para galerías, presentaciones para museos, kits de prensa.

        Dónde la puedes publicar: tu portafolio, tu sitio web, catálogos de exhibiciones y afiches, artículos y entrevistas.

        Tu biografía de artista incluye hechos importantes en tu vida y te describe a ti como persona y como artista. Incorpora tu historia y conecta la manera en que los eventos que han ocurrido en tu vida han influenciado tu obra.

                                                 

        Sobre tu vida: ¿cuándo y dónde naciste?, ¿en qué lugares has vivido?, ¿cuál es tu profesión?, ¿qué estudiaste en la escuela?, ¿cuándo comenzaste a interesarte en el arte? ¿Quién te interesó?, ¿cuáles grandes obstáculos has enfrentado en tu vida?

        Sobre tu arte: ¿cuáles temas están presentes en tu obra? ¿De qué “se trata”?, ¿qué se destaca en tu técnica frente a otros artistas?, ¿qué esperas que la gente obtenga de tu arte?, ¿qué es lo primero que la gente suele notar sobre tu arte?, ¿cómo ha cambiado tu arte durante tu carrera?, ¿quiénes son tus influencias artísticas?

        Y ahora, ¿puedes dibujar una línea entre los eventos de tu vida y tu arte?

        Una vez que tengas una idea, deberás incluirlo en la historia de tu vida de manera enfocada, interesante y concisa.

Elementos necesarios:

        1. La longitud correcta. Tu biografía de artista no debe tener una longitud mayor a una página impresa. Sin embargo, cuando envíes tu biografía, revisa siempre si existen requerimientos respecto a cantidad de palabras. La regla general es de aproximadamente 100-600 palabras.

        2. Que esté escrita en tercera persona. Una biografía de artista debe ser algo que pueda imprimirse tal como esté en un artículo o catálogo. No obstante, un par de citas pueden darle personalidad y un toque de variedad.

        3. Que sea interesante y accesible. Tus momentos más decisivos en la vida no necesitan estar cargados de acción: tu vida puede haber cambiado por algo que se te ocurrió bañándote. Cuenta tu vida de manera que cualquiera que la lea se pueda relacionar e identificar con ella. Gran parte de esto se logra manteniendo un tono claro y profesional, sin ser demasiado clínico y distante.

        4. Que se pueda leer. Pídele a alguien que la revise también. Quedan prohibidos los errores gramaticales y ortográficos. Por otra parte, The Hemingway Editor (www.hemingwayapp.com) es una herramienta gratuita y muy útil que la puedes encontrar fácilmente en línea, que puede ayudarte a evitar que tu redacción se torne demasiado compleja.

        5. Que explique la historia de tu obra. ¿Cuáles son tus influencias artísticas y cuál ha sido tu recorrido? Escribe el ‘quién’ y el ‘por qué’ de tu arte. Mencionar a otros artistas que hayan influenciado tu trabajo puede ayudarte a poner en contexto tu trabajo y a añadirle legitimidad.

        6. No exageres. Los profesionales del arte saben cuándo les están mintiendo, y no impresionan los artistas que presumen ser los “mejores” en su campo.

        8. Que incluya tus “mayores éxitos”. Es importante incluir algunos de tus logros más importantes en tu biografía, sólo recuerda mantenerte centrado. No deberías mencionar más de cinco logros en tu biografía, de otra manera el nivel de interés del lector recibiría un impacto negativo. Esta información con frecuencia puede quedar bien en el párrafo final.

        9. Que nos deje con ganas de más. Tu biografía debe darnos suficiente información para tener una noción sobre ti y tu obra, y nos debe dejar con ganas de ver las obras. Así que no escribas demasiado: no canses al lector con demasiados detalles, pues al terminar de leer, no tendrán energía qué dedicarle a tu obra, tu declaración, o el resto de tu portafolio. Debes sentirte seguro y apasionado sobre lo que escribes.

10. Fotografía de identificación. Una biografía de artista no se trata solamente de las palabras. Al incluir un retrato, puedes ayudar a los lectores a conectarse contigo a un nivel más personal.

Mantener y Cultivar

        Tu biografía de artista crecerá y cambiará según lo hagas tú. No tengas miedo de editar tu biografía a medida que tu estilo, tu técnica o tus temas cambian, pues la inspiración también cambia. Nada permanece estático. Ningún artista crea las mismas obras una y otra vez. Tu biografía deberá ser un reflejo de ese movimiento a través de tu viaje como artista.

Derechos de autor
Publicado el: 01/09/16

                                           

Cómo Proteger Tu Arte

Tu arte es una inversión personal de tiempo, dinero, esfuerzo y pasión, pero sobre todo, tu propiedad intelectual. Protegerlo es prioridad. He aquí ciertas maneras de lograr esto.

Cómo Proteger tu Arte Contra Violación de Derechos de Autor

Se establecen derechos de autor cuando una obra original es creada de forma tangible (no solo conceptualmente). Sin embargo, puede resultar difícil probar que alguna obra no registrada es de tu propiedad, y por esto es importante que mantengas un registro físico o digital.

Registra tus obras.

Se recomienda que siempre registres tus obras en el Instituto Nacional del Derecho de Autor, en México. (Dirección: Calle Puebla 143, Colonia Roma Norte, Delegación Cuauhtémoc, Código Postal 06700, Ciudad de México).
            Aunque técnicamente existen derechos de autor automáticamente al momento de la creación, registrar tu obra asegura que tengas suficiente evidencia de que te pertenece. Esto además te permite pedir más dinero en caso de que sea necesario realizar una demanda por violación de derechos de autor.

Visita la página web del INDAUTOR: http://www.indautor.gob.mx/formatos/registro/registro_obras.html. Llena el formulario de registro y paga la tarifa que se solicita. Después de esto sigue los pasos que se te indican.

Acostúmbrate a digitalizar tus obras.

Tener una biblioteca digital de tus obras te ahorrará muchas complicaciones en caso de violación de derechos de autor. Generalmente la metadata de todas las fotografías almacena la fecha en que fueron tomadas.

¿Cuáles de tus obras están en riesgo?

Si produces arte abstracto o conceptual (más difícil de reproducir), entonces tu riesgo de violación de derechos de autor será significativamente menor. Sin embargo, si tienes piezas que incluyen criaturas o personajes que podrían replicarse o copiarse, o si creas imágenes muy icónicas o que tienen un gran atractivo en el mercado, entonces sin dudar debes protegerlas.

Lee los Términos y Condiciones.

¿Promocionas tu arte en redes sociales? Cuando publiques tus obras en sitios web, asegúrate de leer los términos y condiciones para determinar qué tipo de protección de derechos de autor tiene tu arte en cada sitio. En caso de que no estés seguro, añade una marca de agua a las imágenes.

Cómo Proteger tus Obras en tu Sitio Web

Agrega Marcas de Agua a tu Obra

Una marca de agua es un logo o nombre que se coloca sobre una imagen. Las marcas de agua te dan crédito como autor de la imagen y es muy difícil que alguien pueda remover o cambiar esto. Usa un símbolo de copyright junto a tu nombre (o un logo, si tienes uno), y coloca tu marca de agua de manera notoria a lo largo de la imagen. No la coloques en el borde – de lo contrario podrían simplemente recortar la imagen.

Publica Únicamente Imágenes Pequeñas, de Baja Resolución

Para la mayoría de las personas, una imagen pequeña y de baja resolución no vale la pena a la hora de robarla. Pero antes de que conviertas tus imágenes, guarda el archivo original por separado.

Puedes usar cualquier software de edición de imágenes para modificar su tamaño. Desde Photoshop hasta Paint, el proceso es universalmente similar. Con frecuencia encontrarás la opción “Modificar tamaño” en la barra de herramientas “Editar”. Convertir los archivos a una resolución menor (la configuración ideal es de 72dpi) puede ser un poco más complicado.

Verifica regularmente si alguna de tus imágenes ha sido copiada o robada usando la búsqueda de imágenes de Google:

La búsqueda de imágenes de Google es capaz de escanear tus imágenes (de manera similar a cómo funcionan los escáneres de huellas digitales). Esto hace que Google pueda encontrar cualquier copia idéntica que se haya publicado en Internet.

  1. Abre la Búsqueda de Imágenes de Google en tu navegador web.
  2. Haz clic sobre el ícono de la cámara para iniciar la búsqueda por imágenes. Puedes pegar el URL de la imagen, si se encuentra publicada en línea, o subirla desde tu computador o dispositivo. Si la imagen se encuentra en otros sitios web, esto aparecerá inmediatamente.
                             

Inhabilita el Clic Derecho con JavaScript

La mayoría de las computadoras tienen tecnología de captura de pantalla, así que aunque inhabilites la funcionalidad de clic derecho, algunas personas pueden encontrar otras maneras de violar tus derechos de autor. De hecho, inhabilitar el clic derecho podría hacer incluso que tu página web sea menos sencilla de usar. Sin embargo, es otra manera fácil de proteger parcialmente las fotografías de tus obras en línea.

                                                                                       

Impresiones de edición limitada
Publicado el: 11/08/16

                                          

Consideraciones al hacer impresiones de edición limitada

Tomar la decisión de vender impresiones en edición limitada puede ser una manera excelente de generar interés entre coleccionistas y generar un sentido de urgencia alrededor del proceso de compra. Es importante que tomes ciertos factores en cuenta: cuál será el tamaño de la edición, cómo firmar, cómo fechar correctamente las impresiones, etc.

El tamaño de tu edición

Las impresiones en edición limitada tienden a ser más valiosas que las ediciones abiertas, pero una vez que establezcas el tamaño de esta edición no podrás cambiar de opinión e imprimir más. Si lo haces, no solo implicaría que no cumples tu palabra, lo cual de por sí daña tu reputación (los compradores de ediciones limitadas a menudo basan sus decisiones en el hecho de que la pieza es limitada), sino que disminuye el valor de las piezas que ya has vendido. No existe un número correcto o incorrecto, trata de seleccionar un número tomando en consideración cuántas impresiones te gustaría o crees que podrías vender. Y cualquiera que sea el número que decidas, no es necesario que imprimas toda la serie inmediatamente. Solo debes etiquetarlas cronológicamente a medida que se impriman.

Deja espacio a opciones

Puedes realizar ediciones limitadas en diferentes tamaños siempre y cuando les comuniques claramente a tus compradores a qué te refieres al decir que la pieza es una edición limitada. Esto es, por ejemplo, hacer una edición limitada de impresiones en tamaño póster, y luego otra edición abierta de postales más adelante.

Piensa a largo plazo

Vender una serie completa de impresiones de edición limitada es lo ideal, pero podrías sentir que deberías haber hecho una serie más grande para poder satisfacer el mercado e incrementar tus ventas. Esta sensación es natural, pero aun así no es ético incrementar el número de la edición una vez que lo hayas establecido. En lugar de esto, trata de recordar que esta demanda por tus obras se convertirá en interés para las piezas que realices más adelante.

Cómo etiquetar

Al etiquetar fotografías, serigrafías, litografías, etc., firma cada impresión con un lápiz afilado en el borde inferior fuera de la imagen. Indica el número de impresión en la parte inferior izquierda, el título en el centro y tu firma y fecha a la derecha. Has esto de la misma manera para todas y cada una de las impresiones de la edición.

Sé formal

Sé claro respecto al número de impresiones limitadas de la serie, qué tipo de papel y de tinta fueron empleados al imprimir el trabajo, y documenta cada una de las unidades que vendas. Incluye una factura de venta y un certificado de autenticidad original con cada venta. Estos documentos deben estar firmados, fechados y mencionar la ficha técnica de la obra (y en caso de que aplique: tipo de impresora, tipo de tinta, fecha de impresión y tamaño de serie).

Guarda y etiqueta correctamente tus pruebas de artista

Durante el proceso de impresión, es posible que te quedes con un número de impresiones del mismo nivel de calidad que el producto terminado que te entregará la imprenta para asegurarse de que todo está bien antes de proseguir con el resto de las impresiones. Estas impresiones iniciales se denominan “Pruebas de artista”. Dichas pruebas deben estar firmadas y enumeradas por separado, agregando P/A para distinguirlas.

Firma tu obra

Sin importar cuán identificable creas que son tus obras, recuerda firmarlas siempre. Tomarte algo de tiempo para decidir cómo firmarás y cuál será una manera consistente de etiquetar tu trabajo también te ayudará más adelante a prevenir problemas de autenticación.